Nacido en Chihuahua, en 1946, se distinguió por su inteligencia, amplia cultura y erudición, así como por ser un ensayista y crítico acucioso y puntual.
El escritor, fallecido el miércoles, rescató la novela picaresca y dio a la narrativa nacional una nueva experimentación con ese género, dijo Hernán Bravo Varela.